Las mejores 3 maneras para aprender a decidir [2021]
Un poco de ironía en el título para introducirnos en la idea de cómo trascender desde la decisión. Probablemente a más de uno le haya pasado la situación de tomar una, dos, tres o muchas decisiones erróneas de manera continua y creer que no está hecho para decidir. Y, de hecho es verdad, algunos seres humanos estamos desarrollados para decidir mejor que otros. Esto se debe a que biológicamente algunos pueden decidir mejor en distintos ambientes, ya sea bajo presión o periodos de mayor reflexión. Entonces ¿Será posible mejorar en nuestra toma de decisiones? Probablemente. A continuación compartiré el secreto del éxito.
Mi mirada en el asunto es más similar a Pavesi. Al analizar sus textos, la imagen que generó en el lector es de “aceptación”. Hago referencia a este término por el hecho de que el autor da por sentado que el humano va a seguir tomando decisión por más de que no se utilicen metodologías, aunque él recomiende la toma de decisión con un procedimiento previo. En cambio, la mirada de Lovallo & Sibony es mayormente estadística y rígida al respecto, abarca la temática de los CEO y gerentes que deciden aplicar ciertos análisis como si fueran una fórmula al éxito.
Al igual que Ariely, me gusta analizar los lugares en donde el ser humano se transforma en un ser primitivo. La primitividad genera que se pueda distinguir actitudes acerca de la decisión con claridad. El pone el ejemplo del supermercado, yo tomaré uno más particular. Hace un poco más de un año cuando entré en el mundo del trading aprendí la verdad sobre tomar decisiones. Esa sensación de creer que conoces la sociedad entera y sos el dueño del mercado. Pero por otro lado, en una decisión mala pasas a ser la persona con coeficiente intelectual más bajo del mercado. Esa constante puja de subidas y bajadas llevan al ser humano al estado más primitivo en la toma de decisiones. Es el lugar donde mejor se puede analizar y cuantificar la toma de decisión. Una sin fin de indicadores y funciones para mejorar la toma de decisiones, y aun así hay miles de diferentes estrategias.
Al comenzar, mis primeras compras fueron acciones y bonos de manera inexperta. Escuchaba los “exitosos” youtubers, artículos de expertos, grupos sociales de señales y era un especialista en comprar por FOMO (Fear Of Missing Out). Los primeros 2 meses al entrar fueron excelentes, una rentabilidad muy alta con respecto a los traders promedio. Pero, los siguientes meses se empezaron a oscurecer cuando la curva de crecimiento tomó otro camino, a la vez cada vez que más aprendía peor me iba. Claro, pero no debería ser al revés…
Siguiendo mis viejos hábitos de principiante y combinándolos con los nuevos indicadores y estrategias era una la combinación perdedora de todos los tiempos, entre la nueva frustración por la derrota y las pésimas decisiones que iba a seguir tomando fueron tiempos muy duros. Pero, como se dice en el fútbol, después de “parar la pelota y levantar la cabeza”, las cosas empezaron a cambiar. Como la mayoría autores plantean, las acciones de la sociedad y los bias personales, el ser humano sin un proceso riguroso es doblemente probable a tomar decisiones erróneas. Por lo tanto, para evitar nuestros problemas humanos hay que intentar separarnos lo mayormente posible de nuestros sesgos, sentimientos y creencias. De esa manera poder predecir las acciones de los demás homosapiens que no utilizan un procedimiento de accionar. En los últimos tiempos se popularizó el uso de robots para hacer trading. Se debe a la facilidad con la que se pueden ejecutar procedimientos rigurosos sin que la naturaleza humana y su toma de decisiones cambie la estrategia.
Para no dejar a nadie con la intriga paso a explicar cómo continuó la historia. Otro gran problema que me di cuenta en aquel momento era la velocidad con la que uno se encierra a decidir, la ansiedad reduce las posibilidades. Por lo tanto, uno se apura a tomar decisiones que no tenían urgencia. En el trading siempre se dice que la gran diferencia entre los traders es su paciencia. Aunque costó entenderlo siempre hay que respirar hondo y alejar los gráficos para mejorar resultados. Entonces, si hay una cierta situación en la que uno actúa mal bajo ese tipo de presiones lo correcto sería limitar las decisiones tomadas en aquellos lugares de incomodidad.
Por otro lado, los objetivos son la clave del planeamiento y famoso risk management. Poner objetivos a corto y largo plazo siempre clarifica el camino y pondrán en contexto cualquier situación.
En conclusión, nunca se podrá garantizar el éxito de una decisión. Pero, ayudará enormemente en el funcionamiento y la relación uno a uno entre la decisión y el individuo. Se debe buscar la manera de adoptar una estrategia o procedimiento que cueste tan poco tiempo a la persona que no genere en la persona pereza. Pero a la vez, debe ser lo suficientemente complejo y riguroso para garantizar la mejora de la toma de decisión.